Estos trabajos han resuelto los problemas en la cimentación del edificio ocasionados por  los cambios de humedad y sus efectos en las arcillas expansivas. Las obras, de gran complejidad por el carácter técnico de la remodelación, han consistido en rodear la cimentación de drenajes para evitar en lo posible los cambios de humedad y que éstos afecten a los movimientos de las arcillas del terreno y la realización de micropilotajes de hasta doce metros de profundidad para llegar hasta la capa estable del terreno. También en esta primera fase se ha cometido la reurbanización de la zona. Los trabajos han tenido una duración de casi un año y  un coste cercano a los 500.000 euros.

Una vez concluida la primera fase de las obras de mejora del Hospital Clínico Veterinario se acometerán los trabajos de saneamiento y reparación de los daños estéticos ocasionados en el interior del edificio.