Jueves, 14 de Abril de 2011 11:23

La Cafetería del Rectorado acoge una cata dirigida de aceite impartida por José Manuel Bajo Prados

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Un momento de la cata Un momento de la cata F.G.
La Cafetería del Rectorado de la Universidad de Córdoba ha acogido una cata dirigida de aceite que ha sido presentada por Luis Luque, coordinador de acciones culturales del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Baena, e impartida por José Manuel Bajo Prados, secretario general del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Baena. La actividad, organizada por la Dirección General de Cultura, ha contado con la presencia del rector José Manuel Roldán Nogueras, así como del vicerrector de Estudiantes y Cultura, Manuel Torres, varios miembros del equipo de gobierno y la propia directora general de Cultura, Carmen Blanco.

Bajo Prados ha llevado a cabo una charla amena y entretenida en la que ha introducido a los asistentes en el mundo del aceite que se extrae de la oliva, antes de proceder a la cata. El ponente ha señalado que “no existe el aceite de oliva”, sino “los aceites que se sacan de la oliva”.

Por otro lado, ha distinguido entre los aceites llamados zumos de los que no lo son. Los zumos, según ha comentado, serían las variedades del virgen extra (sin defectos), el virgen (se admiten pocos defectos) y el lampante, siendo este último un aceite no apto para el consumo. Respecto a los aceites que no son zumos, ha distinguido el refinado y el aceite de oliva. El primero sería un aceite al que se quitan el mal olor, el mal color y el mal sabor, mientras que el segundo es resultado de una mezcla entre el refinado y el aceite de oliva virgen extra.

Posteriormente, ha indicado una serie de atributos positivos que suelen caracterizar al aceite, como sabores y olores que evocan al catarlos. Pueden remitir a hojas verdes, hierba, sabor dulce, etc. Respecto a los atributos negativos, ha señalado moho-humedad, esparto, tierra, metálico, alpechín, etc. Y ha dado pautas para una correcta conservación del aceite, que puede introducirse en la nevera y mantenerlo a 4 grados centígrados.
Por último, antes de la cata, ha comentado que el aceite suele catarse “en copas de color azul” y su temperatura debe de ser siempre para esta acción de 28 grados centígrados menos dos.