¿Qué es un virus?

- Son programas de computadora.

- Su principal cualidad es la de poder autorreplicarse.

- Intentan ocultar su presencia hasta el momento del provocar el problema.

- Producen efectos dañinos en el "huésped".

Síntomas que indican la posible existencia de un virus

Cuando el ordenador es infectado por algún virus, el ordenador puede experimentar una serie de problemas, los cuales pueden indicarnos la existencia de algún virus en el equipo. Entre los principales síntomas son los siguientes:

- Aparición de archivos o directorios extraños.

- Dificultad para arrancar el PC, o no conseguir inicializarlo.

- Apagado del equipo sin haberlo solicitado.

- Borrado de ficheros, sin una explicación aparente.

- Reducción del espacio libre en la memoria o en el disco duro, debido a que el virus se debe alojar obligatoriamente en memoria. Este factor puede no ser detectado, ya que normalmente el tamaño de un virus es pequeño.

- Aparición de mensajes de error no comunes. Este factor puede ser determinante a la hora de detectar el virus, ya que algunos creadores de virus introducen en los mismos algún mensaje que deje constancia de su creación.

- Fallos en la ejecución de los programas.

- Frecuentes caídas del sistema.

- Las operaciones rutinarias se realizan con mayor lentitud, aunque este factor puede ser debido a otras causas, como errores en el disco duro.

Daños que puede provocar un virus

Los virus pueden provocar daños muy variados. Los más comunes son, por ejemplo, hacer sonar un pitido al pulsar una tecla, borrar ficheros, formatear el disco duro, e incluso pueden llegar a apropiarse de claves de administrador del sistema y provocar daños impredecibles. También pueden afectar al hardware, borrando la BIOS o modificando la información del sensor del temperatura del microprocesador de manera que éste se queme.

¿Persiste un virus en el ordenador después de apagarlo?

Si el virus está situado sólo en la memoria RAM (cosa poco frecuente), al desconectar la alimentación el virus se borrará. No obstante, lo normal es que el virus infecte también el disco duro, con lo cual se volverá a activar cuando se cargue de nuevo el sistema operativo.

¿Puede un virus propagarse mediante los ficheros de datos?

No, ya que un virus debe ser ejecutado para poder realizar su acción, con lo cual, en un fichero de datos lo máximo que puede hacer es corromper dichos datos.

¿Puede un virus propagarse mediante el correo electrónico?

Sí, además, es uno de los métodos de propagación más frecuentes. El virus puede venir incluido como un archivo adjunto al correo, normalmente con las extensiones .exe, .bat, .com, .vbs, ... Incluso puede que el remitente del mensaje sea alguien conocido, puesto que hay virus que se reenvían como un archivo adjunto a todos los contactos que pueden leer de la libreta de direcciones de su cliente de correo, por tanto, tenga sumo cuidado al ejecutar cualquier archivo adjunto. También es posible que el virus venga incluido dentro del código HTML del mensaje, por lo que se activará con sólo leerlo. Debido a esto, es una buena medida de protección desactivar la opción de vista previa que incluyen algunos clientes de correo, como Outlook Express 6. En este caso, la opción se desactiva desmarcando la casilla "Mostrar panel de vista previa" situada en el menú Ver - Diseño.

¿Puede un virus propagarse mediante carpetas compartidas?

Sí. Los virus intentan propagarse por carpetas compartidas, mediante la libreta de direcciones...

¿Qué se debe hacer si se detecta un virus?

En primer lugar, desconectar el equipo infectado de la red, para evitar posibles contagios a otros equipos. Por supuesto, no se deben compartir ficheros o programas con otros usuarios, ni por correo electrónico ni mediante disquetes. Se deberá indicar al programa antivirus que intente limpiar el archivo o los archivos infectados. Si el antivirus es incapaz de limpiar el archivo, se deberán borrar los archivos infectados.

Precauciones

- Debe poseerse un antivirus actualizado, y el sistema operativo también debe estar actualizado.

- Deben analizarse con el antivirus todos los discos que se utilicen en el equipo antes de abrir cualquier archivo.

- Correo electrónico:

- Desactivar la vista previa del cliente de correo. Si se utiliza el programa de correo Outlook Express 6, se puede activar la opción "No permitir que se guarden o abran archivos adjuntos que puedan contener un virus", situada en Herramientas - Opciones - Seguridad.

- Se aconseja tener un programa anti-spam.

- Se debe tener cuidado con los archivos adjuntos enviados, y antes de ejecutar cualquiera de ellos se deberá comprobar con el programa antivirus.

- Cualquier correo que ofrezca instalar algún juego, salvapantallas, actualización de software... puede ser un virus. Debe asegurarse de quién lo envía y si lo ha pedido.

Preparación del disco para instalación de Windows y Linux.

El primer aspecto a tener en cuenta es que no se pueden crear las particiones necesarias para instalar Linux mediante la herramienta "fdisk", ya que ésta sólo permite manejar particiones FAT o FAT32. Por tanto, se deberán utilizar otras herramientas.

Básicamente, y sea cual sea la herramienta que se utilice, lo necesario para instalar un sistema Linux son dos particiones: una partición de tipo Linux Ext2, y otra partición de tipo Linux Swap.

La partición de tipo Linux Swap sirve para implementar la memoria de intercambio (memoria virtual). Esta memoria se utiliza para aumentar el rendimiento del sistema, sirviendo como una memoria temporal en la que se almacena parte de la información de los programas que se están ejecutando, pero que no está siendo utilizada en ese momento. Normalmente, se debería asignar a esta partición un tamaño igual o superior al de memoria RAM de que disponga el equipo, no excediendo normalmente de un tamaño de dos veces la memoria RAM.

La partición de tipo Linux Ext2 (partición "root") sirve para implementar el sistema de archivos de Linux. El tamaño que se debe asignar dependerá del espacio disponible en el disco duro, y de los requisitos mínimos de la versión de Linux que esté instalando.

Nota: Siempre debe instalarse Windows antes que Linux, ya que el primero sobrescribe la información de arranque que encuentra en el disco duro. En cambio, Linux normalmente utiliza un gestor de arranque, como LILO o Grub, que permite arrancar tanto particiones Linux como Windows.

Resumen: Para instalar Windows y Linux en una misma máquina, deben realizarse las siguientes particiones:

- Una partición primaria de tipo FAT o NTFS, que servirá para la instalación de Windows.

- Una partición extendida, de tipo Linux Ext2. Esta partición debe colocarse después de la partición de Windows.

- Una partición extendida, de tipo Linux Swap.

Seguidamente, se instalará en primer lugar el sistema Windows, y posteriormente Linux, siguiendo las instrucciones de instalación.

Reglas básicas a tener en cuenta:

- Pasar de una versión de Windows a otra que es más actual: se instala la nueva versión, guardando previamente todos los datos de importancia que se tengan.

- Pasar a una versión de Windows más antigua: Este proceso no está previsto por Windows, por lo que habrá que realizar un formateo rápido del disco (habiendo guardado previamente todos los datos de importancia). El formateo rápido elimina todos los archivos existentes en el disco. El comando para el formateo rápido es "format c: /q", siendo c: la letra asignada a la unidad que contiene el sistema operativo. Una vez realizado, se arranca desde el disco del sistema operativo a instalar.

 

Nota: Cuando pasemos de Windows 2000 o Windows XP a Windows 9x, el cambio de versión conlleva un cambio de sistema de ficheros, por tanto, el proceso a realizar es eliminar la partición NTFS, con la herramienta "fdisk", y crear una nueva partición con el sistema de archivos FAT.

Preparación del disco para instalación de Windows y Linux.

El primer aspecto a tener en cuenta es que no se pueden crear las particiones necesarias para instalar Linux mediante la herramienta "fdisk", ya que ésta sólo permite manejar particiones FAT o FAT32. Por tanto, se deberán utilizar otras herramientas.

Básicamente, y sea cual sea la herramienta que se utilice, lo necesario para instalar un sistema Linux son dos particiones: una partición de tipo Linux Ext2, y otra partición de tipo Linux Swap.

La partición de tipo Linux Swap sirve para implementar la memoria de intercambio (memoria virtual). Esta memoria se utiliza para aumentar el rendimiento del sistema, sirviendo como una memoria temporal en la que se almacena parte de la información de los programas que se están ejecutando, pero que no está siendo utilizada en ese momento. Normalmente, se debería asignar a esta partición un tamaño igual o superior al de memoria RAM de que disponga el equipo, no excediendo normalmente de un tamaño de dos veces la memoria RAM.

La partición de tipo Linux Ext2 (partición "root") sirve para implementar el sistema de archivos de Linux. El tamaño que se debe asignar dependerá del espacio disponible en el disco duro, y de los requisitos mínimos de la versión de Linux que esté instalando.

Nota: Siempre debe instalarse Windows antes que Linux, ya que el primero sobrescribe la información de arranque que encuentra en el disco duro. En cambio, Linux normalmente utiliza un gestor de arranque, como LILO o Grub, que permite arrancar tanto particiones Linux como Windows.

Resumen: Para instalar Windows y Linux en una misma máquina, deben realizarse las siguientes particiones:

- Una partición primaria de tipo FAT o NTFS, que servirá para la instalación de Windows.

- Una partición extendida, de tipo Linux Ext2. Esta partición debe colocarse después de la partición de Windows.

- Una partición extendida, de tipo Linux Swap.

Seguidamente, se instalará en primer lugar el sistema Windows, y posteriormente Linux, siguiendo las instrucciones de instalación.

En ocasiones, es necesario iniciar el ordenador sin cargar el sistema operativo, para realizar tareas como el formateo, la creación de particiones, porque se desee eliminar el mismo sistema operativo, o por problemas de virus. Para estos casos, se debe tener un disquete de arranque con las herramientas básicas para el formateo y el manejo de particiones, y algunos controladores para la utilización de dispositivos como el CD-ROM.

- Windows 9x: Para crear un disco de arranque, ir a Panel de Control - Agregar o quitar programas - Disco de inicio. En estas versiones de Windows, el disco de arranque contiene las herramientas format y fdisk, así como los controladores de CD-ROM.

- Windows 2000: Para crear los discos de arranque, necesitará el CD de instalación y cuatro disquetes. Haga clic en Inicio - Ejecutar, y escriba "D:\bootdisk\makeboot a:", siendo D la letra de la unidad de CD. Estos discos no contienen las herramientas fdisk y format.

- Windows XP: Para crear los discos, se deberá acudir a la página web de Microsoft y bajar una determinada aplicación que permite crear los discos. La aplicación para Windows XP Home se encuentra en este enlace , y para Windows XP Professional se encuentra en en este otro enlace . Estos discos, al igual que los de Windows 2000, no contienen las herramientas fdisk y format.

Nuestra recomendación es conservar un disco de inicio de Windows 98, ya que éste incluye todas las herramientas necesarias.