Por haber sabido, cristiano letor, que este Flos Sanctorum se ha impreso diversas veces sin orden mío y que las impresiones salen con muchos errores, algunos de los cuales son pretendidos de industria por personas que, siguiendo sus particulares pareceres, dicen otro de lo que yo digo y tengo bien averiguado, por obviar este daño di lugar a que el muy diligente en su arte platero Pedro Ángel hiciese este retrato, que es como firma mía. Y, así, donde estuviere entenderase que la impresión se hizo por orden mía, y por lo mismo irá mejor correcta. Por el contrario, digo que cualquiera de las partes de este Flos Sanctorum donde no se hallare este mismo y no otro contrahecho por él, que no se tenga por mía, antes debería evitarse como sospechosa. Vale.