[7]
A DON JUAN DE ARGUIJO, DON FRANCISCO NINO DEL CARPIO
Siendo Dios sumo tesoro
y tan enseñado a dar,
le ofrecemos en su altar
tal vez la plata y el oro.
Si a Lope podéis dar vos [5]
los
versos
que os
da,
mirad
que llevan la voluntad,
para que
imitéis
a Dios.