Información sobre el texto
Título del texto editado:
Exequias de la lengua castellana. Sátira menipea (fragmento)
Autor del texto editado:
Forner, Juan Pablo, 1756-1797
Título de la obra:
Exequias de la lengua castellana. Sátira menipea.
Autor de la obra:
Forner, Juan Bautista Pablo
Relación de todos los textos preliminares de la obra:
* «Noticia del autor y razón de la obra, todo en una pieza» («El licenciado don Pedro Hipnocausto…»); pp. 3-45
Transcripción realizada sobre el ejemplar Juan Pablo Forner, Exequias de la lengua castellana, ed. de José Jurado, Madrid, CSIC, 2000
(texto completo)Encoding: Elena Cano Turrión
Editor: Javier Álvarez
Córdoba, 12 marzo 2020
(…) El reinado de Felipe III, aunque infeliz en la administración de los negocios públicos, no fue sino felicísimo para nuestra habla.
Herrera,
León y Rioja añadieron a la majestad que ya lograba en sus versos la
grandilocuencia
y
sublimidad
que no se había dejado aún ver en la estructura de sus períodos. Los dos Argensolas juntaron con
talento
admirable las galas de una poesía varonil a la severidad de la
moral.
Cervantes, ese
soldado
andrajoso
que veis ahí, creó el estilo
jocoso
y dio inimitables ejemplos de
narración
fácil y amena, del diálogo urbano y
elegante,
del arduo modo de expresar con las frases la
ridiculez
de los hombres. Su pluma fue un pincel en cuanto escribió, y su
Quijote
es un
ejemplar
o idea de los estilos más agradables. Entonces yo (permitid esta libertad a mis canas), salido apenas de la edad pueril,
traduciendo
y imitando al
dulce
Anacreonte,
di, si no me engaña mi amor propio, el primer
ejemplo
de aquella lozanía que no conocía aún nuestra lengua y que, con excesiva prodigalidad, se dejó ver después en los
escritos
de los reinados posteriores. Lope, redundante en todo, llenó sus versos y prosas de descripciones amenas, de metáforas ricas, trasladando desde su
imaginación
al papel cuantas imágenes le ofrecía la portentosa variedad de ideas que depositaba en ella. En este tiempo fue cuando la lengua empezó a tomar diverso semblante del que había tenido en el tiempo anterior. Los
escritores
que dieron de sí los reinados de Fernando el Católico, Carlos V y Felipe II manifiestan un carácter
grave,
robusto, natural; las cláusulas caminan con una especie de reposo severo; la estructura de los períodos es lenta y noble (tal vez, poco sonora, aunque muy suave e ingenua). Desde mi época en adelante, facilitando más y más el uso de la lengua con el lujo y esplendidez elegante de la corte de Felipe V, empezó a comparecer rápida, lozana, viva,
sonora,
jovial, florida, galante, deliciosa; cuyos caracteres se perciben distintísimamente en los escritos de
Quevedo,
de Ulloa, del Príncipe de Esquilache, de Saavedra, de Calderón y de Solís. Comparad los escritos de estos con los de Herrera, León, Garcilaso, Granada, Mariana y Morales y hallaréis una diferencia tan notable en la expresión de unos y otros cual se halla, con igual motivo e iguales causas, entre los de Lucrecio, Terencio, César, Salustio, Livio, y los de Séneca, Petronio, Floro, Tácito y Curcio, etc., etc.(…)
GRUPO PASO (HUM-241)
FFI2014-54367-C2-1-R
FFI2014-54367-C2-2-R
2018M Luisa Díez, Paloma Centenera