DE LUIS ROSICLER DEL CARPIO
Si así fue hermosa y
cantó
Belisarda, poca
pena
fue la que Anfriso lloró,
que
Ulises
no se alabó
de que engañó
tal
sirena. [5]
No os alabo por ser parte
y porque el cielo reparte
en tal Vega tal belleza,
que aquí la
naturaleza
está vencida del
arte.
[10]