Título de la obra:
La hermosura de Angélica,
en
La hermosura de Angélica, con otras diversas rimas,
ff. ¶1v.-241v.
[8]
PROLOGO.
Ludovico Ariostro en el canto XXX de su
Orlando,
en la estancia XVI, dice así:
Quanto, Signore, ad Angelica accada
dopo ch'uscì di man dal pazzo a tempo;
e come a ritornare in sua contrada
trovasse e buon navilio e miglior tempo,
e de l´India a Medor desse lo scettro,
forse altri canterà con miglior plettro.
Y las anotaciones de Jerónimo Rusceli sobre el canto treinta y ocho dicen que fue intención de Ariosto que otros ingenios
prosiguiesen
su historia y, para prueba de esto, cita la referida estancia. Pues, como en todo su
Orlando
no tenga cosa más notable que el suceso de Angélica, argumento y sujeto de su
Furioso,
y ésta dejase
casada
con Medoro y advirtiese que otros lo prosiguirían, aunque imposible, con mejor plectro, como él por humildad dice, yo, aficionado a su poema, libre y deseoso de saber lo que adelante le había sucedido a Angélica, hallé que la mayor parte fue en España, y por comunicarlo a
todos
los deseosos de aquel suceso, en una
jornada
de mar, donde con
pocos
años iba a ejercitar las armas, forzado de mi
inclinación
ejercité
la pluma; donde a un tiempo mismo el general acabó su empresa, y yo la mía. Allí, pues, sobre las aguas, entre jarcias del galeón Sant Juan y las banderas del Rey Católico escribí y
traduje
de
Turpino
estos pequeños cantos; a cuyas rimas puse después la última
lima,
dejando casi otros tantos que puede haber de la misma historia no menos sabrosos a otro mejor ingenio, que los prosiga; pues lucirá más, corriendo tras mi
ignorancia,
que mi discurso humilde después de la celebrada tela del famoso Ariosto.