[14]
DE D. LORENZO DE MENDOZA
Frutos
bien
reconocidos,
regalo al
alma,
gloria a los
sentidos
de tu fértil terreno,
Vega
hermosa,
tus altos
pensamientos
son por
disposición
maravillosa [5]
con divinos acentos
y estilo siempre igual,
grave,
ilustrados,
en dicha de este suelo,
en confusión de
ingenios
celebrados,
en interés del cielo; [10]
pues de haberte entregado en su tesoro
testigos son Angélica y Medoro.