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DE DON JUAN LUJÁN DE ARAGÓN, CABALLERO DE LA ORDEN DE SANTIAGO, Y AMIGO DEL QUE ESCRIBIÓ LAS NOVELAS
SONETO
Eterno
te nos cuente, Mauseolo,
las edades en glorioso trofeo,
sin que la envidia haga vil empleo,
al más oculto manifieste Polo.
En duro bronce, Lizarazu solo [5]
buril dedique en mármores de Ybleo,
y sacrifique a tus aras el Sabeo,
aromas que
reverencie
el culto Apolo.
Por tu
ingenio,
hermoso Manzanares,
Glorias a sus Linfas multiplique, [10]
que en piélagos, deidad blasone eterno.
Y divertido en ti, dilate mares,
porque, suspenso de tu
luz,
publique
tantos quilates en Crisol tan tierno.