visualizar documento

Más información

Información técnica

AL LECTOR

Si en este mi libro hallares algo bueno, agradécelo a mi trabajo, y las faltas perdónalas a la rudeza de mi ingenio; acertarás en lo uno y en lo otro. Las materias de que trato son difusas, y en ellas intervinieron diversas maneras de personas, tiempos, lugares y sucesos; si de algunos dignos de memoria te pareciere que no hago mención, cree que no ha sido pasión o negligencia, sino falta de relaciones; y, aunque pudiera escusarme con decir que esta obra es una curiosidad escrita en verso y que no está obligada a ser historia general, digo que quien con razón pudiere quejarse sea a mí, y no de mí, que en otra impresión quedará sin queja, como yo sin culpa. En cuanto al hecho de la verdad de las cosas que trato, forzosamente habrá diferentes opiniones, como las hay en todos los casos de que muchos deponen; lo que yo pude hacer fue en las evidencias estar a lo cierto, y en las dudas atenerme a lo verosímil, porque si esta no fuera mi intención más espacioso campo hallara para escribir y más oportunidad para esplicarme en otros sujetos de invención que en el de la historia y tan moderna. De dos cosas no se me podrá hacer cargo. La una de que no tomé el consejo de Horacio, pues gasté diez años de perpetuo estudio en componer y limar este tratado. Y la otra de que antes de sacalle en público no consulté gravísimos tribunales, por cuyo aplauso y autoridad fui, no solo conortado, pero casi compelido a manifestarlo, como constará por lo precedente. Los defetos que fueren enmendables me hallarán oyéndolos detrás de la tabla con el pincel en la mano, obediente a cualquiera que alegare verdad por rústica que sea. Mas, si el contexto entero de esta escritura padece general detrimento, no faltará tiempo que la mate, ni olvido que la sepulte, infelice y único remedio de los malos escritores.

GRUPO PASO (HUM-241)

FFI2014-54367-C2-1-R FFI2014-54367-C2-2-R

2018M Luisa Díez, Paloma Centenera

Información sobre el texto