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Buena carta de Madrid escrita postrero día de julio de este año de 1618, enviada a don Francisco de Calatayu[d] por don Antonio Hurtado de Mendoza acerca de las
Rimas
de don Juan de Jáuregui
Capítulo de una
carta
de
Madrid
escrita postrero día de julio de este año de 1618, enviada a don
Francisco
de Calatayu[d] por don Antonio
Hurtado
de Mendoza, cerca de las
Rimas
de
don Juan de Jáuregui
Aquí llegó el libro de las
Rimas
de don Juan de Jáuregui, y para los buenos
juicios
de Sevilla no es menester que yo diga lo que pareció en Madrid, pero por el crédito universal importará algo. De solo lo que no se ha hablado mal es de los poetas alabarderos, que están en el cuerpo de guardia con su
soneto
al hombro. Su canción de Vuestra
Merced
la han celebrado más, y las décimas de don Juan de
Arguijo
no han perdido nada, que en ellas se ha conocido nuevamente su severo y atinado entendimiento, pues no sabe alabar bien las cosas malas. Este
caballero
ha dejado descansar las esperanzas que se tenían de su ingenio porque yo, que soy el más
lego
hombre que empuña
pluma
y embraza consonantes, no envidio ninguno de los suyos, y admira que un prólogo tan fantástico y religioso y poblado de precitos criase una vida tan licenciosa y humilde. De veras que a este
mozo
o le tienen poco amor en su patria o él es
sobrado
de presunción, pues no le advirtieron o él no se dejó vencer. Y Francisco de
Rioja
me debe entre muchas partes de mi voluntad el no verle pecar en la alabanza. Pero retírome en mí mismo y hablo con
modestia
en cuanto a
juzgar
de las letras y del talento, pero de las obras ya tengo licencia, pues sé la lengua castellana con aire de andaluz. Y triste del poeta que quiere más hacer el libro grande que bueno, pues imprimió tantas
indecencias
y niñerías aun no sufribles en los
Concetos
de
Ledesma.
Vuestra Merced perdone el haberme alargado en esta materia, y si es de diferente parecer que el mío, o tiene buena voluntad al autor o no está tan discreto como solía. Guarde Dios a Vuestra Merced mil años en Madrid y julio postrero de
1618.
Don Antonio Hurtado de Mendoza