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Platera, la seta. Sombrero: Al principio convexo, después aplanado y por último hundido, conservando un mamelón central. De 5 a 20 cm de diámetro, e incluso sobrepasando estas medidas. Cutícula de color carne, que palidece hacia los bordes, separable y cubierta de un fino polvillo plateado, al que se debe su nombre vulgar. Margen enrollado en la juventud y después extendido, sin estrías ni acanalaciones. |
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| Láminas: De decurrentes a muy
decurrentes, no muy apretadas, arqueadas, con lamélulas; de color blanquecino a crema en
la madurez.
Pie: Cilíndrico hasta la base que se ensancha, robusto, lleno, fibroso, algo más pálido que el sombrero. Carne: Consistente, espesa, rara vez atacada por larvas de insectos, blanquecina, con olor a almendras amargas y sabor agradable, dulzaino. Esporas: Elipsoidales, de 6-8 x 5-7 micras. Esporada blanca. Hábitat: Fructifica principalmente en otoño, en prados, pastizales y claros de bosques. Especie frecuente. La fotografía se realizó en el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche. Observaciones: Podría confundirse con C. gibba, pero ésta es más delgada, pequeña y menos robusta. Existe una muy próxima, que para algunos autores es una variedad y para otros una especie independiente, tiene el pie más largo que el diámetro del sombrero, este es muy embudado y no posee mamelón, se trata de C. maxima (Fl. Wett ex Fr.) P. Kumm. o C. geotropa var. maxima. Es un buen comestible. |
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