CSIF exige al Gobierno facilitar la necesaria renovación del profesorado universitario.

  • Incrementando la financiación y suprimiendo una tasa de reposición que ha diezmado las plantillas.
  • Permitiendo la estabilización de profesores laborales y la captación de jóvenes a través de amplias convocatorias de plazas en las Ofertas de Empleo Público.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios alerta de un grave problema de relevo generacional y denuncia que las universidades públicas presentan unas plantillas menguadas y envejecidas por falta de fondos y por las disparatadas tasas de reposición que han existido desde el comienzo de la crisis.

Los docentes de 50 años o más representan el 48,0% del profesorado de Enseñanza Universitaria según los datos del anuario estadístico “Las cifras de la educación en España. Estadísticas e indicadores correspondientes al curso 2016-2017”, publicación elaborada recientemente por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.

CSIF señala que en las universidades públicas el 32,2% del profesorado total está en la franja de edad de 40-49 años, el 34,7% entre 50 y 59 y el 14,9% son mayores de 60 años. Así, en los próximos siete años las universidades perderán casi la mitad de sus catedráticos y gran parte de sus Profesores Titulares. Por el contrario, en las universidades privadas estos datos sugieren unas plantillas más jóvenes, el 34,8% del profesorado está entre 40-49 años, el 23,7% entre 50-59 y tan sólo el 6,7% es mayor de 60 años.

Las universidades públicas que tienen en plantilla más de un 20% de profesorado con más de 60 años son la Autónoma de Madrid (20,1%), la Complutense de Madrid (24,8%), Universidad de Granada (21,4%), Universidad de la Laguna (22,5%), Politécnica de Madrid (22,9%), Universidad de Salamanca (22%), Santiago de Compostela (25,2%) y la UNED (28,3%). Por lo cual, casi una cuarta parte de esta plantilla está próxima a su jubilación. Sin embargo, en las universidades privadas ninguna sobrepasa el 15 % del profesorado con más de 60 años, se encuentra a la cabeza la Universidad Ramón Llull con el 13,7% de este personal.

Para el sindicato, otro factor que complica este escenario es la precariedad e inestabilidad de las plantillas. CSIF recuerda que sólo el 42’3% de los profesores de universidades públicas son funcionarios mientras que más del 57%, incumpliendo la Ley Orgánica de Universidades, son contratados laborales en sus diferentes figuras docentes. Para colmo, Hacienda vuelve a intervenir y como acaba de hacer recientemente congela, por ejemplo, la promoción de 140 profesores de la Jaume I de Castellón impidiendo una solución al grave problema del relevo generacional.

El envejecimiento y la disminución de la plantilla va a generar un enorme problema en las universidades que afectará directamente a la docencia y la investigación y, por ende, a la viabilidad del sistema español de ciencia y tecnología. Ante este panorama, CSIF pide al gobierno incrementar la financiación, suprimir la tasa de reposición, estabilizar las plantillas y permitir amplias ofertas de empleo público.

El Anuario Estadístico demuestra también la falacia de la mayor atención personalizada a los alumnos en las Universidades Privadas.

De los 120.383 profesores en las universidades españolas 102.383 pertenecen a universidades públicas los cuales imparten clases a 1.241.355 alumnos (12,12 alumnos por profesor) y 18.086 a universidades privadas que imparten clase a 252.040 (13,94 alumnos por profesor).

Muestra de la repercusión en los medios nacionales de la reciente crítica de CSIF al “Estatuto del Personal Investigador Predoctoral en Formación

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