FLORA DEL CERRO DEL CASTILLO DE BELMEZ

 

La orografía abrupta y litología caliza del cerro del Castillo le confiere numerosos microhábitats para especies vegetales, algunas de ellas muy escasas en el resto de Sierra Morena (sector Marianico-Monchiquense) dominado, principalmente, por materiales ácidos como pizarras, cuarcitas y granitos.

La gran mole rocosa caliza del Mississippiense (hace 359,2 Millones de años), además de emblema histórico y paisajístico de la comarca, es un refugio natural para numerosas especies de plantas. Sus cortados y grietas están tapizados por especies arbóreas como el acebuche (Olea europaea var. sylvestris) o el almez (Celtis australis), arbustivas como el aladierno (Rhamnus alaternus) o la esparraguera blanca (Asparagus albus) o herbáceas típicas de ambientes rupícolas, entre las que destaca la presencia de la solanácea basófila y nitrófila, el beleño blanco (Hyoscyamus albus) o la euforbiácea Mercurialis ambigua.

Los pastizales terofíticos situados en la base del castillo están formados por diversas herbáceas con predominio de las gramíneas de los géneros Bromus y Aegilops, así como otras plantas nitrófilas, que se alternan con algunas matas bajas de lavándula (Lavandula stoechas) o de tomillo (Thymus zygis). Durante la primavera, numerosas plantas herbáceas anuales se engalanan con multitud de colores. A comienzos de esta estación las praderas se tiñen de azul, e incluso a veces blanco, de las flores de la iridácea bulbosa Juno planifolia. Esta floración en masa es uno de los mayores espectáculos paisajísticos que pueden observarse en el Cerro del Castillo. Semanas después estas praderas se cubren de margaritas blancas y amarillas entre las que destaca el rosa intenso de las orquídeas Ophrys tenthredinifera y Orchis champagneuxii..

En total tenemos constancia por ahora de 89 especies de plantas. De estas, la mayoría son típicas de suelos silíceos, predominantes en Sierra Morena, mientras que otras son típicas de suelos calcáreos, muy escasos en esta Sierra. La riqueza de especies aumentará conforme se avance en los muestreos estacionales previstos dentro del Proyecto Alto Guadiato Arqueológico/Ager Mellariensis-UCO.

 

Rafael Obregón Romero

Universidad de Córdoba.