foto montilla

El sábado 7 de abril a las 8:15, un grupo de 30 personas de la Cátedra partimos hacia Montilla. El día se presentaba lluvioso, pero no nos amilanó, imperaba el hecho de tener un buen día de convivencia.

Al llegar a nuestro destino, nos encontramos con otros compañeros de las sedes de Montilla y Lucena.

Estaba previsto realizar un sendero de unos 6 Km a fin de conocer La Fuente Nueva y su historia. Como la noche anterior fue muy lluviosa y el camino no estaba en buenas condiciones, el Concejal de Participación Ciudadana, D. José Antonio Bellido que muy amablemente nos acompañó durante toda la jornada, propuso hacer una visita más completa a la ciudad, incluyendo el convento de Sta Clara que no estaba previsto.

Partimos de Llanos de Palacio, después de un buen desayuno, recorriendo las calles más emblemáticas de la ciudad pudimos apreciar las fachadas de:

            -La Casa de las Camachas, construida en el S.XVI y donde vivieron las Camachas, señaladas según la leyenda como brujas y alcahuetas. Una de ellas, Elvira García ¨ La Camacha¨, la inmortaliza Cervantes en el Coloquio de los Perros.

            -La iglesia de S. Francisco Solano, patrono de la ciudad en la que nació en 1549. Después de ordenarse sacerdote partió a las Indias como misionero. Murió en Lima en 1610 y fue canonizado en 1626. La edificación del templo se hizo sobre el solar de la casa en que nació. Fue restaurado por los duques de Medinaceli entre los años 1773/77. Benedicto XIII lo canonizó en 1726.

            La Basílica de S. Juan de Ávila. Fue anteriormente la iglesia de la Encarnación y elevada a la categoría de basílica pontificia menor por decreto de fecha junio de 2012 firmado por el cardenal Antonio Cañizares Llovera. En ella se albergan sus restos guardados en el ¨Arca del Testamento¨

Llegamos al convento de Santa Clara que fue fundado por el primer marqués de Priego, D. Pedro Fernández de Córdoba en 1525; es un convento franciscano. En 1255 se convirtió en el de Santa Clara, creado por Mº Jesús de Luna, hija de dicho marqués. De esa fecha data la iglesia, muestra del gótico mudéjar cordobés que se atribuye a Hernán Ruiz. Tiene unos ricos artesonados mudéjares y un retablo mayor churrigueresco del S. XVIII. La portada es de estilo gótico renacentista. Este convento está declarado Monumento Histórico Nacional.

A continuación nos dirigimos a la casa museo del Inca Garcilaso, lugar donde vivió Gómez Suarez de Figueroa, apodado Inca Garcilaso, desde 1561 a 1591. Fue un escritor e historiador de ascendencia hispano-incaica nacido en el actual Perú. Aquí escribió parte de su obra. La casa posee varias dependencias, patios, biblioteca, despacho y bodega. La casa, después del Inca, fue adquirida por el Conde de la Cortina que la donó al pueblo de Montilla. El edificio fue restaurado en 1992. Actualmente se encuentra en ella la oficina de Información y Turismo.

Continuamos la ruta para llegar a la Casa de las Aguas. Recibe este nombre por estar situados en este recinto los depósitos desde donde se distribuía el agua para la ciudad. Fue el ingeniero D. José María Sánchez Molero, que vivió en esta casa, el impulsor del abastecimiento de agua a la población. Más tarde, en 1940, la casa fue adquirida por la Condesa de Aguilar, hermana del VII conde de Cortina. El edificio es una casa palacio de fines del S. XIX. La vivienda se estructura alrededor de un patio porticado, con tres plantas de altura. Este inmueble construido en 1845 acoge desde junio de 2006 el único museo dedicado al pintor José Santiago Garleno y Alda. El responsable de la exposición nos deleitó con sus explicaciones a lo largo de la visita. La exposición alberga 180 obras que han sido seleccionadas para que podamos ver las distintas etapas y facetas del artista. En la 2º planta se ubica la sede permanente de la Fundación Biblioteca Manuel Ruiz Luque que contiene un conjunto de 3000 volúmenes, entre los que se hallan la mejor colección de historias locales de las existentes en España, junto a un buen número de raros ejemplares y una sección de manuscritos. Con este proyecto, Montilla manifiesta su voluntad de proseguir en ese ¨renacimiento¨ que comenzó en el S.XVI con un activo foco intelectual donde el Inca y Cervantes inmortalizan a la ciudad y donde Martín de Roa y S. Juan de Ávila ejercen un sabio magisterio.

A continuación el autocar nos lleva a la Bodega de Cabriñana, situada en plena sierra de Montilla, de producción artesanal y desde 1925 denominación de origen. Después de la degustación de varios tipos de vino, nos vamos a comer al Restaurante El Quijote de la ciudad.

Ya con el estómago lleno, paseamos hacia el Castillo. Los restos del castillo están situados en la cima de un montículo que desde el Norte domina la población. Allí nos recibe una guía que con sabias explicaciones nos acompaña durante todo el recorrido. Se trata del castillo de los antiguos señores de Aguilar, fortaleza medieval que en 1508 mandó derribar Fernando el Católico como castigo a la rebelde conducta de D. Pedro Fernández de Córdoba, 1º marqués de Priego. Aunque el recinto quedó arrasado, quedan vestigios que permiten saber que era un extenso conjunto rodeado de numerosas torres: La Dorada, Del Sol, Del Centinela, De la Defensa, De Minerva y De Diana. En el S.XVIII se construyeron en su solar los graneros ducales, inmensa fábrica de sillería que se levanta sobre las demás construcciones, con una configuración tan monumental que desde las afueras, más parece una grandiosa iglesia que un edificio industrial. Las obras se iniciaron en tiempos de D. Nicolás Fernández de Córdoba, duque de Medinaceli y marqués de Priego. La edificación del Alhorí fue realizada por el arquitecto cordobés Juan A. Camacho. El castillo fue comprado por el Ayuntamiento en 1998. En 2007 se iniciaron las obras para convertirlo en el Museo del Vino de Andalucía.

Quiero citar el barrio de Escuchuela, situado muy cerca del castillo, que debe su nombre a una de las numerosas torres del castillo. Desde aquí se pueden admirar unas fantásticas panorámicas.

Terminada la visita al castillo, nos dirigimos hacia el autocar, no sin antes pararnos en la famosa confitería de la localidad.

Por último, agradecer su trabajo a todos los que han hecho posible esta salida. A Ángel como promotor y que por cuestiones familiares no pudo acompañarnos, a nuestra querida compañera Carmen que generosamente se responsabilizó de la actividad, al concejal que nos acompañó e hizo de guía a lo largo de todo el recorrido y por último, a todos los participantes que con su talante contribuyeron a hacer posible un día de convivencia extraordinario.

 

Fotos

 

Texto: Pilar Cabrera.

Fotos: Carmen Serrano.