Un estudio de la Universidad de Córdoba permite conocer cuáles son las variedades de olivo más resistentes a una epidemia que puede arruinar toda la producción

Las abundantes lluvias de los años 1996 y 1997 crearon el caldo de cultivo para que en 1998 se produjese la mayor epidemia de antracnosis en el olivo conocida en las últimas décadas, pero también para que se intensificasen los estudios de este patógeno.