El sábado a las 7:30 salimos para Cazorla con nuestras mochilas cargadas de ilusión.
Llegamos a la cerrada de Utrero cuyo primer tramo transcurre paralelo al Guadalquivir, y en el que pudimos ver la presa que alimentaba a la Central Eléctrica. Más adelante nos encontramos con la Cola del Caballo, huella que el arroyo de Linarejos ha ido formando al verter sus aguas al Guadalquivir. "Qué pena de sequía". Continuamos bordeando el peñón del Lanchón, donde anidan los buitres. Más adelante, pudimos admirar desde el mirador la gran variedad de verdes y la majestuosidad del valle.
Llegamos al camping del Puente de las Herrerías, donde descansamos y repusimos energías, para continuar hacia el parque Cinegético. Pasamos una tarde estupenda observando y aprendiendo a distinguir los grandes mamíferos que viven en el parque. A continuación recorrimos un pequeño sendero que pasaba por el mirador del Castillo, desde el que se ve el pantano del Tranco de Beas, y que nos llevaba al mirador de las Animas, donde nos esperaban las aves rapaces.
Una vez finalizado, vuelta a Cazorla a descansar y probar las ricas viandas que nos habían preparado.
Comienza la segunda jornada con el desayuno a las 7:30 para salir pasito a pasito a las 8h. Nos dirigimos a la Torre del Vinagre, para desde allí, comenzar la ruta del Borosa. Ruta donde se disfruta del paraje y del sonido del agua que nunca nos abandona. Pronto se le une el arroyo de las Truchas. D. José Aguilar, director de la cátedra, nos hace observar que estamos en una zona de fallas geológicas y nos explica con detalle cómo y cuándo se formó el relieve del que estábamos disfrutando. Nos señala las diferencias de los pinos que crecen en el lugar: laricios, resineros y carrascos.
A unos 3 Km, atravesamos el puente de los Caracolillos, donde también podemos observar plegamientos y fallas. Continuando la ruta, llegamos a la cerrada de Elías, que es un encañonamiento natural del río; en sus paredes umbrías crece una planta carnívora de origen cuaternario: la Pinguícula. Es la parte más espectacular del trayecto. Las fotos muestran parte de la belleza del lugar, pero hay que estar allí para percibirla en su magnitud.
Regreso al hotel, comida y regreso a casa.
Hay que destacar el espíritu de camaradería que ha vivido el grupo. Ganas de pasarlo bien y de disfrutar de la Naturaleza.
Agradecimientos a D. José Aguilar por dedicarnos su tiempo libre y al organizador por haberlo hecho tan bien y tan barato.
Album de fotos -> https://goo.gl/photos/QrthdMKMqoX7hipP8
Apuntes del profesor -> http://www.uco.es/intergeneracional/index.php/apuntes/finish/44/4887
http://www.uco.es/intergeneracional/index.php/apuntes/finish/44/4889
Texto y fotos: Carmen Serrano. Alumna de la Cátedra Intergeneracional