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Jueves, 15 de Julio de 2004 12:03

Corduba 04. Fons Mellaria. El uso de material de desecho en clase fomenta en los niños un consumo responsable

G.C. - R.A.
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Después de tres años de trabajo sistemático con materiales de desecho en niños más de 100 profesores de Andalucía han comprobado que éstos contribuyen a fomentar hábitos saludables como un consumo racional y responsable. La iniciativa para educar en el respeto al medio ambiente a los más pequeños valiéndose de objetos reutilizados surgió, hace ya tres años, en el colegio público rural "Bembézar" de la provincia de Córdoba.

Según explicó la especialista en educación infantil del C.P.R "Bembézar" María Teresa García, dentro de los Seminarios Fons Mellaria que se celebran en Fuente Obejuna, este colectivo decidió explotar didácticamente los materiales de desecho por ser una fuente de recursos a la que se puede acceder fácilmente consiguiendo inculcar hábitos en los más pequeños para que respetasen la naturaleza. En este sentido señaló que "al trabajar con objetos reutilizables se familiarizan con ellos y aprenden a sacar partido de materiales inservibles".

La experiencia se ha revelado, según María Teresa García, como una vía a través de la cua, los niños se vuelven más creativos, responsables y reflexivos. Son capaces, como señaló, "de valorar lo que nos rodea y les cuesta tirar las cosas". La consecuencia más inmediata es que, al aprender a emplear un simple cartón o plástico para hacer un juguete, se sorprenden de la cantidad de basura que se genera , de modo que , al final, terminan por concienciarse de los problemas que generan los residuos y aprenden el proceso selectivo para separarlos. También se recurre, añadió, al propio entorno natural para que se familiaricen con las especies en extinción o las clases de árboles o flores autóctonas.

A esta propuesta educativa para el intercambio de experiencias con materiales de desecho en el campo de la educación ambiental se han sumado ya 11 centros andaluces: nueve de Córdoba, uno de Sevilla y otro de Jaén. Como único recurso se valen de las "ecoideas": productos elaborados con cartones, cartulinas, papeles o plásticos que sirven para estimular no sólo un consumo saludable sino la psicomotricidad de los más pequeños , su capacidad de respuesta ante los problemas, su lógica y su lenguaje.