PRIMER CONVENIO MARCO SOBRE INTELIGENCIA ARTIFICIAL Y DERECHOS HUMANOS

Hace escasas fechas, el Consejo de Europa – organismo compuesto por 46 países, entre los que se incluyen los 27 de la UE más otros tan relevantes como Reino Unido, Suiza, Turquía o Ucrania- han aprobado la primera norma jurídica vinculante sobre Inteligencia Artificial (IA).

El denominado Convenio Marco sobre Inteligencia Artificial y Derechos Humanos, Democracia y Estado de Derecho incide en la necesidad de articular sistemas de IA confiables y coherentes con los derechos humanos, garantizando su estricta protección, así como la integridad de los procesos democráticos y el máximo respeto al Estado de Derecho.

A continuación, explicamos el contenido de este importante acuerdo internacional, al que deberán ahora adherirse los Estados, estando prevista su entrada en vigor a partir del mes de septiembre, y en la que también hacemos un llamamiento a la necesidad de usar el V AENC -que dedica un apartado a esta tecnología- para garantizar el principio de control humano y el derecho a la información sobre los algoritmos y las IA´s laborales.

UGT ANALIZA EL PRIMER CONVENIO MARCO SOBRE IA Y DERECHOS HUMANOS

El pasado 17 de mayo, el Comité de Inteligencia Artificial del Consejo de Europa (organismo que abarca a los 27 países de la UE y otras 19 naciones del continente europeo como Reino Unido, Suiza, Turquía o Ucrania), aprobaron el primer Convenio Marco sobre Inteligencia Artificial y Derechos Humanos, Democracia y Estado de Derecho, primer tratado internacional jurídicamente vinculante sobre esta tecnología.

En base a este Convenio, los 46 países firmantes se comprometen garantizar que los sistemas de IA sean confiables y coherentes con los derechos humanos (incluidos todos los relacionados con el mundo del trabajo), adoptando cuantas “medidas legislativas, administrativas o de otro tipo” sean necesarias para cumplir con este Convenio. De este modo, se pretende certificar que cualquier AI en explotación, tanto por autoridades públicas o privadas, respete los siguientes aspectos:

• La protección de los derechos humanos, así como la dignidad humana y autonomía individual, mediante mecanismos de igualdad y no discriminación.

• La integridad de los procesos democráticos y respeto al Estado de derecho.

• El funcionamiento confiable de cualquier IA, mediante obligaciones de transparencia y supervisión, una gestión adecuada de riesgos e impactos, respetando privacidad y protección de datos personales, y siempre bajo parámetros de rendición de cuentas y responsabilidad.

Finalmente, el Convenio también efectúa llamamientos a la alfabetización y competencias digitales, destaca los derechos de las personas con discapacidad y de los niños y llama a que estas obligaciones se realicen con procedimientos de consulta pública, en la que necesariamente los Sindicatos tendremos un papel fundamental y destacado.

El Convenio entrará en vigor tres meses después de la fecha de adhesión de cinco países, de los que al menos tres deben ser Estados miembros de la UE27. No obstante, el tratado se firmará en Vilna el 5 de septiembre durante una conferencia de ministros de Justicia.

Este primer tratado internacional se inspira, en gran medida, del Reglamento europeo de IA, del que reproduce una gran parte de sus objetivos. Este Reglamento ha sido ya analizado por nuestra Organización, desgranando su contenido y sus repercusiones en el ámbito laboral1. Del mismo modo, la reciente Estrategia de Inteligencia Artificial 2024 publicada por nuestro gobierno apunta en direcciones semejantes2.

UGT llama a las empresas y AAPP a ponerse a la tarea de cumplir y hacer cumplir tanto este Convenio como las obligaciones que emanan del Reglamento europeo y la Estrategia española de IA. Aun cuando dichas obligaciones tengan un largo periodo de adaptación – en algunos casos de más de dos años-, no podemos cometer los mismos errores que con el RGPD, que después de años de moratoria entró en vigor con múltiples organizaciones incumpliéndolo.

Asimismo, cabe destacar que la materia que protegen todas estas regulaciones son aspectos fundamentales de nuestra Democracia, como son el estricto respeto a Derechos Fundamentales, por lo que no caben excusas ni dilaciones. Por ello, instamos a las empresas y patronales a ponerse a la tarea dentro del marco que nos hemos dotado mediante el diálogo social en forma del V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (V ANEC) que dedica un capítulo completo a la Inteligencia Artificial y a garantizar los mismos elementos que el Convenio internacional que acaba de aprobarse: garantizar el principio de control humano y el derecho a la información sobre los algoritmos y las IA laborales3.