El barómetro se basa en una Encuesta realizada entre el 10 y el 20 de abril de 2023, a una muestra de 402 personas residentes en Córdoba capital mayores de 18 años, seleccionadas mediante muestreo aleatorio sistemático, según un criterio de afijación proporcional a las cuotas de sexo y edad establecidas de acuerdo con el Padrón Municipal. El error muestral es de +/- 4,9%, para un nivel de significación o confianza de 95%.
Los datos obtenidos a través de la encuesta ofrecen una imagen acerca de las opiniones y valoraciones de la población, dentro de un marco de probabilidad (margen de error y confianza). En ese sentido, los datos han de entenderse como una imagen probable y aproximada a la misma (una tendencia).
Situación económica, laboral y ambiental
Entre los resultados del Barómetro, destaca que más de la mitad de la población de Córdoba (el 54%) considera que la situación económica es “mala” o “muy mala”. Pese a este dato, dicha valoración es 19 puntos más baja que en 2020. En relación a la situación laboral de Córdoba, el 65% de las personas consultadas consideran que Córdoba ofrece pocas o ninguna posibilidad para encontrar empleo. Tal es la situación que 1 de cada 4 cordobeses (el 25%, es decir, unos 65.000 cordobeses/as) ha barajado emigrar a otra ciudad de España o del extranjero para buscar trabajo. Entre la población menor de 34 años, se ha planteado emigrar el 52% (28.966 personas) y, por niveles de estudios, se lo han planteado el 30% de quienes disponen de estudios universitarios y el 25% de quienes cuentan con estudios secundarios.
En cuanto a la percepción de la coyuntura por la inflación económica actual, entre 8 y 9 de cada 10 personas admite que la inflación económica actual le afecta especialmente en la compra de alimentos y el pago de la factura de electricidad (el 91% y el 82%, respectivamente). En otros ámbitos el impacto es menor. El aumento del impacto de la inflación se ha incrementado en los últimos tres meses 15 puntos, en el caso de la compra de alimentos, y 8 puntos, en el abono de la factura de la electricidad.
En relación a la percepción del impacto del cambio climático en Córdoba, 8 de cada 10 cordobeses (el 84%) consideran que la ciudad no está preparada para afrontar las consecuencias del cambio climático. En cuanto a las medidas que propone la ciudadanía cordobesa, 7 de cada 10 consideran que las tres principales medidas a adoptar para combatir el cambio climático son la mejora en la gestión del agua, la ampliación de zonas verdes y forestales y el impulso de la energía alternativa. En este marco, al preguntarles sobre la controversia derivada de la creación del nuevo campo de golf, más de la mitad de la población (el 54%) muestra su desacuerdo con esta iniciativa.
Valoración de la gestión municipal y autonómica
En cuanto a la evolución de la situación de Córdoba en estos cuatro años de gobierno municipal, 4 de cada 10 cordobeses opina que la situación de Córdoba sigue igual que antes (el 41%), algo más de 6 de cada 10 (el 62%) consideran que el Ayuntamiento de Córdoba no ha hecho esfuerzo para crear empleo local en la última legislatura, alrededor de 8 de cada 10 expresan que la gestión municipal de la limpieza, la seguridad y el mantenimiento de los barrios de Córdoba “sigue igual” o “ha empeorado” (el 45% y el 34%, respectivamente). Y, como balance general, sólo 1 de cada 4 cordobeses (el 24%) consideran que los servicios municipales han mejorado en los últimos 4 años.
En relación a la gestión del gobierno andaluz, se ha preguntado sobre la externalización de la sanidad pública, por preocupar ampliamente a la población. Se ha preguntado “¿Tiene usted la percepción de que el gobierno de la Junta de Andalucía está favoreciendo a la sanidad privada en detrimento de la sanidad pública?”, respondiendo afirmativamente casi la mitad de la población (el 48%), frente a 4 de cada 10 cordobeses (el 42%) opina que no es así. Un 10% expresa que “no sabe”. Al mismo tiempo, también se les ha planteado si “¿Estaría dispuesto a destinar más dinero público a la sanidad privada para cubrir necesidades del servicio público de salud?”, respondiendo casi 7 de cada 10 personas en desacuerdo a destinar más dinero público a la sanidad privada.
Comportamiento electoral ante las próximas elecciones municipales del 28M
Al preguntarle por sus prioridades políticas, la población cordobesa plantea casi por unanimidad que las dos principales prioridades políticas del gobierno municipal tras el 28M deben ser crear empleo local y tejido industrial (el 97%) y reducir la desigualdad social y la pobreza de Córdoba (el 90%). Otras posibles prioridades políticas que plantean son mejorar la atención de los barrios (85%), mejorar la oferta de vivienda pública (83%), adecuar la ciudad para hacer frente al cambio climático (83%), reforzar los servicios públicos (81%), impulso y proyección internacional de la cultura (65%) y, finalmente, trabajar por la igualdad de género (64%).
En cuanto a la intención de votar y la decisión del voto en las próximas elecciones, 3 de cada 4 cordobeses (el 75%) afirman que irán a votar con casi toda seguridad en las próximas elecciones municipales y, de estos, 4 de cada 10 (el 43%) admiten que aún no saben a quién van a ir a votar.
En cuanto al conocimiento y valoración de los candidatos que concurren a las próximas elecciones municipales, José María Bellido (PP) y Juan Hidalgo (Hacemos Córdoba) son los únicos candidatos a la alcaldía que aprueban la valoración de la población cordobesa, con un 5,9 y un 5,1 (sobre 10), respectivamente. Los dos candidatos más conocidos son José María Bellido (PP), al que conocería el 86%, y Antonio Hurtado, al que conoce el 50% de la población cordobesa. Se puede considerar que la valoración de Juan Hidalgo y la de José María Bellido son las más favorables como elemento de transversalidad dentro de bloques de votantes de izquierdas y de derechas, respectivamente.
Para finalizar, si en el momento presente se convocasen elecciones municipales, de acuerdo con la estimación de voto[1], el Partido Popular ganaría las elecciones con un 37,97% de los apoyos (8,97% más que en las pasadas elecciones, pero quedaría aún lejos de la mayoría absoluta). PSOE contaría con el 24,51% de la confianza social de la población cordobesa; 2,51 puntos menos que en las pasadas elecciones municipales. IU y Podemos, junto a Más País, Equo Andalucía, Alianza Los Verdes e Iniciativa del Pueblo Andaluz, que se presentan conjuntamente con la marca Hacemos Córdoba, contaría con un 22,49% de los votos; 6,29 puntos más que en las pasadas elecciones municipales. VOX recibiría el 10,3% de los votos del electorado, lo que significa 2,3 puntos más que en las pasadas elecciones municipales. Y Ciudadanos recibiría un 1,76% de los votos; lo que significa 13,35 puntos menos que en las pasadas elecciones. PACMA (con un 2% de los apoyos; 0,87% más que en las últimas elecciones municipales), situándose así por delante de C’s. El porcentaje de abstención sería en torno al 13% de la población en edad de votar.
Estos resultados producirían algunos cambios en la distribución de concejales entre los distintos grupos municipales —si se comparan con los de las elecciones municipales del pasado 26 de mayo de 2019—, aumentando en 3-4 en el caso del Partido Popular, manteniéndose igual o perdiendo 1 en el caso del PSOE, aumentando en 2 en el caso de la coalición Hacemos Córdoba, resultando igual o 1 más en el caso de VOX, y reduciéndose 2-3 en el caso de Ciudadanos. Para poder realizar dicha estimación, se ha aplicado el sistema de la Ley d'Hondt.
Como conclusión de la estimación electoral, el Partido Popular ganará las próximas elecciones municipales, pero quedará aún lejos de la mayoría absoluta. Necesitaría cogobernar con VOX. En términos de gobernabilidad, el bloque de izquierdas y centro izquierda y de centro izquierda y el bloque de derecha y centro derecha se encuentran en situación de empate técnico.
El informe completo puedo consultarse aquí.
[1] Nota de los autores: En el presente informe solo presentamos los datos de ESTIMACIÓN, por considerarlos más fiables que los datos de INTENCIÓN DIRECTA DE VOTO. La estimación la elaboramos a partir de un análisis de regresión incluyendo las siguientes variables: (1) recuerdo de voto, (2) intención directa de voto, y (3) simpatía por los partidos políticos. Dada la volatibilidad del voto en nuestros días, basarse en la intención de voto puede conducir a un sesgo importante en la interpretación del comportamiento electoral.